Odio

Querido odio:

Hace tiempo que quería escribirte y a pesar de que no viva el día más odioso, gris, pegajoso y ansioso de los últimos tiempos, me dirijo a ti.

Odio a las personas que no saben utilizar sus paraguas en los días de lluvia.

Odio a las personas que no dan las gracias al darles algo y tengo que devolverles un de nada vacío.

Odio a las noches de insomnio que me has dado.

Odio no soportar las cuestas que hacen que se me acelere el pulso hasta parecer que el corazón se me sale por la boca.

Odio a no tener argumentos ante señoros paternalistas.

Odio a mi propio odio al no aceptar en ocasiones el lugar que ocupo en el mundo.

Odio a dar amor , entrega , cariño, a seres que me exprimen y me seducen con palabras llenas de propaganda efímera.

Odio ante las personas que se creen mejores que otras.

Odio a los discursos cerrados sin opción de entrada.

Odio a las enseñanzas románticas del amor.

Odio a las películas que quería que acabaran de otra manera e igual tuve que terminarlas.

Odio a los mosquitos en medio de la noche.

Odio los granos en sitios inesperados .

Odio a compararme porque si.

Odio a no vivir como un caballo salvaje que corre libre entre diferentes montañas .

Odio a la política que no nos identifica.

Odio mis propios prejuicios.

Odio a las personas que comen con la boca abierta, arrastran los pies, escupen en cualquier lado , que se quejan por cualquier nimiedad y sobre todo ODIO a los cobardes, esos que no son capaces de decirte lo que pasa de verdad.

Odio que tenga que odiarte odio, porque eres y serás siempre el motor de mi crecimiento, lo que me insufla para hacerme la mochila con la que sera mi bso de ese momento para moverme, para alzarme, para gritar desde lo más hondo lo que NO quiero.

Por todo ello gracias odio